Según un portavoz de Microsoft, la compañía ofrecerá a sus clientes de fuera de Estados Unidos almacenar sus datos en datacenters fuera de Estados Unidos. Con este movimiento Microsoft intentará contrarestar las crecientes reticencias de las empresas en hospedar datos y servicios en Estados Unidos debido a la impunidad en la vulneración de los derechos como el de privacidad por parte de la NSA.
En un movimiento que se veía venir de lejos (desde el affaire Megaupload diría yo), las grandes empresas, en este caso Microsoft empezarían a ofrecer datacenters fuera de Estados Unidos a parte de sus clientes. Brad Smith, portavoz de Microsoft comentó que la gente debería saber donde están almacenados sus datos y a que leyes se debe atener por ello y por ende tener la oportunidad de decidir donde alojarlos.
A pesar de que Microsoft insista en que solo ha facilitado información si esta ha sido requerida por cauces legales, la desconfianza por los repetidos escándalos de la NSA (y sus incontables formas de hackear ordenadores, teléfonos, internet hubs...) han provocado sin duda la total desconfianza de los clientes extranjeros hacía la compañía.
En Diciembre, Smith ya comentó que en el caso de datos alojados en otro país, se opondrían con todas las medidas legales a las peticiones de su gobierno. La pregunta es si esto será suficiente o acabará Microsoft plegándose a la NSA (conscientemente o viendo sus sistemas violados)
