A estas alturas, cuando Kim Dotcom ya ha anunciado y puesto en marcha su proyecto me.ga, el caso Megaupload sigue coleando con declaraciones preocupantes por parte del gobierno de Estados Unidos. Según su argumentación en una de las ramificaciones del caso, cuando subimos algo a la nube perdemos nuestros derechos de propiedad sobre el contenido.

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La EFF (Electronic Frontier Foundation) realizó,hace un par de días, una nueva petición ante el juez para recuperar los datos de Megaupload pertenecientes a uno de los muchos usuarios damnificados por el inesperado cierre del servicio. Lamentablemente el gobierno estadounidense no para de poner palos en las ruedas de este tipo de peticiones e incluso en este caso admitió haber accedido a los ficheros de Kyle Goodwin, presumiblemente para utilizar cualquier evidencia que pudiera encontrar contra el mismo demandante que en ningún caso era parte de la investigación contra Megaupload.

Aunque el caso se encuentra en punto muerto y ya le han llovido los palos por todos lados a los métodos empleados en la investigación (principalmente en Nueva Zelanda), el gobierno estadounidense sigue bloqueando todos los ficheros y accediendo a ellos sin ningún tipo de respeto por la privacidad ni la propiedad intelectual de los mismos, denuncia la EFF.

Además de todas estas prácticas que violan cualquier derecho por parte de los usuarios de Megaupload, el gobierno mantiene, según EFF, que Kyle Goodwin perdió los derechos de propiedad del material al subirlos a la nube, escudándose en los "contratos" entre el demandante y Megaupload y por otro lado Megaupload y el hosting Carpathia. Por lo que según EFF lo mismo se aplicaría a otros servicios como Amazon S3, Google Apps o Apple iCloud.

Realmente y viendo como el gobierno estadounidense se salta a la torera cualquier tipo de privacidad en la nube, no solo en este caso sino al pedir (exigir) información privada a servicios como Twitter.. deberíamos pensarnos en que hosting subimos nuestros archivos (nacionalidad...)

Seguimos esperando con expectación a me.ga y su prometida nueva estrategia para fortificar nuestra privacidad.