A raíz de los recientes atentados terroristas en París, el gobierno francés está barajando toda una nueva serie de leyes. Algunas de ellas afectarían directamente a las telecomunicaciones pueden ser la prohibición de Tor y de los puntos de acceso públicos Wi-Fi durante ciertos momentos.
Ciertamente es complicado separar la privacidad personal de los obstáculos que ciertas tecnologías pueden presentar para la policía durante una investigación. Ya hemos visto en diversas ocasiones como se ha cargado contra la encriptación usada por diferentes protocolos en pos de una mayor agilidad en la inspección de datos, especialmente en momentos como estos en los que la comprensible indignación hace muchas veces que se tomen decisiones en caliente.
Estos días se viven momentos complicados a raíz de los ataques terroristas en diferentes puntos del globo y se ha vuelto a poner el foco en diferentes tecnologías a las que se acusa de favorecer el secretismo en las comunicaciones de estos indeseados. El gobierno francés, según documentos filtrado del ministerio de Interior y publicados por Le Monde, se está planteando prohibir el uso de la red Tor y además prohibir las redes Wi-Fi públicas durante determinados momentos como el estado de emergencia en el cual se encuentra Francia.
En la actual situación se prohibiría completamente cualquier red Wi-Fi pública o compartida, obligando a su dueño a desactivarla so pena de cargos criminales. En este caso se alega el uso que pueden hacer los terroristas de estas redes para evitar el seguimiento policial.
Respecto a la red Tor también se propone su prohibición o bloqueo, además de forzar a los proveedores de servicio a identificar y reportar cualquier usuario utilizando este servicio. En este caso esta medida sería independiente del estado de emergencia del país.
Esperemos que sobre estas medidas, aunque hayan podido ser pensadas inicialmente con el fin de dificultar la comunicación de los terroristas, se produzca un debate sosegado ya que también hay que tener en cuenta que afectarán a millones de usuarios que utilizan los mismos de manera legítima. Por otra parte no hay que perder de vista que por ejemplo los terroristas usaron mensajes SMS para coordinar sus ataques en París por lo que estas medidas en caso de haber existido hubieran sido del todo inútiles.
Fuente Le Monde
